Antes que nada, y para evitar gasto de tiempo y no llevar a equívocos al lector que, ilusionadamente, haya abierto esta entrada, esperando encontrar la respuesta a esa pregunta, debo decir que, lamentablemente, no va a encontrar aquí una respuesta concreta. Sí la pongo como título es porque refleja la gran cuestión que hoy está en la conversación de muchísimas personas, en los medios de comunicación y en las redes sociales.
He notado que, en el fondo de esas conversaciones y comentarios, late una cierta decepción y un punto de tristeza al constatar que, en una época de tantos avances científicos y tecnológicos, la meteorología no pueda aún ofrecer una respuesta concreta más allá de unos días vista, al menos para nuestras zonas geográficas. La complejidad del sistema Sol- Océano-Atmósfera, es tanta que, aunque cada vez conocemos un poco más, no es suficiente todavía para modelizarla adecuadamente de modo que podamos obtener predicciones más certeras. Y a ello hay que unir la propia naturaleza caótica de la atmósfera con la necesidad de establecer siempre predicciones de carácter probabilístico. Todo ello hay que explicarlo con sencillez y asumirlo al igual que también asumimos con satisfacción la espectacular mejora de las predicciones a corto y medio plazo durante los últimos 15 o 20 años.
Sin embargo, la constatación de esta dificultad predictiva así como la del conocimiento del carácter cíclico de las sequías en la cuenca mediterránea, no parece que aún hayan convencido del todo a los distintos responsables para tomar medidas más eficaces sobre la gestión del agua. Ya en primavera, a la vista de la situación en aquel momento, comentábamos las dificultades que íbamos a experimentar si el otoño venía seco, como así está siendo. No veníamos ya de una situación de superávit hídrico: si tomamos los datos de los informes publicados en los últimos años por AEMET, cabe recordar que el último año con carácter de "muy húmedo" fue el 2010 (el único que ha habido hasta el momento al menos desde 2005). Después, 2011 y 2012 fueron secos, 2013 y 2014 aproximadamente normales, 2015 muy seco, 2016 normal y 2017....ya vemos como se está comportando.
Pero, más allá del carácter concreto de cada año en los que se refiere a valores absolutos de precipitación, es muy importante tener en cuenta dos cosas más. La primera es la importancia que tiene el "cómo llueve", es decir, si esas lluvias son las más adecuadas para rellenar acuíferos y embalses y ayudar a la agricultura o bien su distribución irregular durante el año y/o su torrencialidad no las hace las más adecuadas, como en buena medida viene ocurriendo. Por otra parte, el carácter cálido o muy cálido predominante de estos últimos años está favoreciendo mucho evaporaciones y evapotranspiraciones contribuyendo así de un modo notable al déficit hídrico.
Y no nos puede servir de mucho consuelo pensar que, de acuerdo con las proyecciones climáticas, las lluvias, aunque disminuyendo, lo harán de forma muy pausada. Aún en el caso de que eso sea cierto, lo que sí parece muy probable es que su irregularidad o torrencialidad y la acusada evaporación se mantengan o incluso puedan aumentar. Ante este panorama creo que debe ir abandonándose, o al menos matizádose mucho, ese comodín de que las sequías son cíclicas en el área mediterránea y de que, al final, siempre llueve. Más bien deberíamos asumir la alta probabilidad de que nuestros recursos hídricos van a ir siendo menores por las causas expuestas. Y desde esa asunción, planificar a largo plazo una adecuada gestión hídrica si no queremos vernos en serias dificultades.
En cualquier caso, si algún lector ha llegado hasta aquí, creo que merece que hagamos algún intento de acercamiento, más que de respuesta, a la pregunta que da título a esta entrada. Pues bien, si consultamos los mapas probabilísticos del Centro Europeo, vemos que entre mediados y finales de la próxima semana algunas vaguadas atlánticas pueden acercarse al oeste peninsular y provocar lluvias en el noroeste y puntos de la mitad oeste. En cualquier caso la incertidumbre es bastante alta y todavía podría haber cambios en uno u otro sentido.
No son muy optimistas tampoco los mapas de predicción del mismo Centro para las próximas tres semanas, ya que siguen apuntando a anomalías cálidas y secas sobre nuestras zonas. Y es muy preocupante porque, de cumplirse, noviembre podría acabar muy seco y con él, el trimestre otoñal.
Anomalías para el 27 de noviembre al tres de diciembre y del 4 al 10 de ese mismo mes. Las precipitaciones van tendiendo a la normalidad en la mitad norte y las anomalía cálida se va debilitando. |
Nos toca confiar ahora en el invierno. Aunque es verdad que, en general, el otoño es siempre más lluvioso que el invierno, ha habido algunos de éstos que nos han ofrecido sorpresas interesantes. Recordemos por ejemplo el año 2009 cuando, tras once meses secos o muy secos, la segunda quincena de diciembre fue especialmente lluviosa, algo que se prolongó durante enero y febrero de 2010. ¿Pasará así en esta ocasión? Es posible, pero, al menos desde la meteorología "ortodoxa", no lo sabemos. Ojalá sea así. Lo que sí sabemos es que en una sociedad actual no podemos ligar solamente nuestro bienestar a esa idea, desde mi punto de vista muy peligrosa, de que "al final siempre acaba lloviendo".
Magnífico artículo y muy sensato mensaje Angel, te felicito por ello. Ojalá las autoridades se hiciesen eco de un sentir más que sensato.
ResponderEliminarGracias Alberto. Hay que insistir, insistir...e insistir. Y concienciar al público todo lo que se pueda. Un saludo.
EliminarMuchas gracias por tu humilde opinión de esta situación tan rebelde del tiempo.
ResponderEliminarGracias Pablo. Siempre que se habla de estas cosas hay que ser muy humilde. Un saludo.
EliminarMientras sigan manipulando el clima con la geo-ingenieria, lloverá cuando ellos quieran!
ResponderEliminarGracias Sergio. Yo creo que no hace falta la geoingeniería. Con la propia naturaleza caótica de la atmosfera pienso que tenemos de sobra. Otra cosa es la geoingeniaria “involuntaria” del dióxido de carbono. En cualquier caso todo mi respeto a tu opinión. Un saludo.
EliminarCada vez que veo el cielo lleno de cheimtrails, y cómo lo censuran en los medios, se me revuelven las tripas.
EliminarHola de nuevo Sergio. En mi opinión el problema con las estelas no es que nos fumiguen con sustancias extrañas, o que traten voluntariamente de influir en el tiempo. El verdadero problema, al menos para mi, es, en primer lugar la gran cantidad de derivados del petróleo que se inyectan en la alta troposfera procedentes de las turbinas con el consiguiente aumento de contaminación. En segundo lugar, pero con menos importancia, la creación de muchas nubes cirros que de no ser por los aviones no hubieran existido. En lo que no creo es en teorías conspiratorias. El sistema atmósfera-océano es demasiado complejo como para intervenir en él a voluntad y conseguir unos efectos predeterminados. Con lo que te comentaba antes, ya tenemos de sobra para preocuparnos. Un saludo y gracias por tus comentarios.
EliminarComparto tu acertada opinión
EliminarCon todos los respetos Sr. Rivera, no nos chupamos el dedo. Tal vez tengan ordenes de no hablar sobre los cheimtrails, pero por favor,no nos tomen por idiotas.
EliminarEstimado sr. Grillo. También con todo el respeto pero desde la mayor sinceridad y claridad puedo asegurarle que durante mi etapa profesional nunca recibí órdenes sobre lo que podía o no podía hablar. Y, por supuesto, ahora jubilado, ninguna en absoluto, faltaría más. Por otra parte, nunca he llegado a ser tan idiota como para considerar a otras personas idiotas o no respetar sus ideas o creencias.
EliminarDicho esto, lo que a mí sí me preocupa del vuelo de los aviones es la contaminación de la alta troposfera por los gases de escape de las turbinas o, en un lugar ya más secundario, el posible efecto de los cirros creados por las estelas. Todo esto sí merece una atención y un estudio más profundo, algo a lo que en mi opinión no ayuda en nada toda la cuestión de los llamados "chemtrails" porque desvía la atención, complica y beneficia a los posibles no interesados en esos estudios.
Un saludo afectuoso y agradecido.
Excelente publicación Ángel, comparto la opinión de Alberto.
ResponderEliminarComo dice el refrán: “Más vale prevenir que lamentar”
Muchas gracias Abelardo. Un saludo.
EliminarHola Angel en que sólo soy aficionado a esta interesante ciencia, observo a diario los distintos modelos meteorológicos y en mi humilde opinion se observa con gran una gran meandrizacion del jet stream formando profundas vaguadas y borrascas con frecuencia en nuestra latitud (Azores) e incluso por debajo pero no lo impide que nos llegue un anticiclón post-azoriano que se enquista en el mediterráneo occidental e incluso se refuerza con la dorsal africana (creo inusualmente potente para estas fechas). Si cambiaria ese patrón y ese anticiclón mediterraneo fuera desplazado podriamos tener un tiempo abiertamente lluvioso, quizás hay esperanza para diciembre
ResponderEliminarHola Antonio. El que el anticiclón se mueva o cambie de forma será la consecuencia de una reestructuración hemisferica del actual patrón ondulatorio del chorro polar. La llegada de las lluvias podria darse por una bajada general de latitud del chorro o por la formación de danas o borrascas. Esto podria ocurrir bien por el estrangulamiento de una vaguada atlantica profunda y bien marcada o por un fenomeno de retrogresion sobre el Mediterráneo. Esperemos que cualquiera de estas cosas ocurra pronto. Un saludo.
EliminarÁngel, no puedo entender cómo de una hora a otra prácticamente cambia radicalmente la predicción. Ayer a las 20.30 h pública Rubén en meteovigo q hay consenso total de los modelos para q llueva la semana próxima de forma generosa en el oeste más...y tu unas horas después públicas todo lo contrario. Me encanta la meteorología, estamos desesperados porque llueva...y eso es lo q me hará dejar de seguir las previsiones meteorológicas porque es imposible saber nada salvo lo que da el día.
ResponderEliminarHola Mari Carmen. No, no digo todo lo contrario. Si lees mi artículo verás que digo que entre mediados y finales de semana es bastante probable que llueva en el noroeste. No hay incoherencia como ves. Puedes seguir perfectamente y con confianza las predicciones al menos para los tres o cuatro primeros días. Otra cosa es que cada vez se den más de forma probabilistica que es la mejor forma de hacerlo. Un saludo y muchas gracias por tu comentario.
EliminarÁngel no puedo entender cómo de una hora a otra cambia radicalmente la previsión, ayer noche todos los modelos coincidían en lluvias generosas para la semana próxima sobre todo en el oeste, y horas después todo lo contrario....me encanta seguir las previsiones porque es darte un día esperanza de lluvia q estamos secos y al día siguiente o antes nada...
ResponderEliminarGracias por tu artículo tan necesario y tan preciso. Gracias en general por tu trabajo. A mí siempre me sorprende ver la falta de alarma con que se afronta esta situación para mí tan preocupante. Y me ha encantado encontrar eco a mí inquietud, un eco, eso sí, moderado y sabio, en tu artículo. Un saludo.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarMuchas gracias por tu comentario y valoración. Como ves compartimos la misma preocupacion. Es increible comprobar la falta de reaccion politica incluso en los mas jóvenes
EliminarPredomina totalmente la visión cortoplacista. Es algo mas preocupante que el propio cambio en
si. Y se podrian hacer muchas cosas empezando por una mucho msyor concienciacion. Vamos a
Un saludo cordial
Es que NUNCA, NUNCA (y esto que quede bien claro que por eso lo pongo en mayúscula) volverá a llover en el sur de España. Esta conclusión ya la tenia yo por inevitable pero se me ha reforzado leyendo tu artículo. La única solución (tras el colapso de la agricultura, los bosques y la sequía para siempre jamás de nuestros ríos, embalses y acuíferos) será hacer las maletas y marcharnos al norte de Europa. No hay más.
ResponderEliminarHola J.O. Siento si he transmitido un mensaje tan drastico. Volverá a llover pronto en el sur peninsular y lo seguirá haciendo. Otra cosa es que la tendencia general sea hacia una progresiva y lenta disminución y a una mayor irregularidad. Por eso es por lo que hay que abordar sin demora un plan amplio, general e imaginativo de planificación hídrica. El que no se haga asi es lo que para mí es muy preocupante. Existe la posibilidad por otra parte de que poco a poco nos afecten más laa circulaciones de carácter tropical y subtropical que también nos podrian dar lluvias aunque esto no está todavía muy edtudiado. No desfallezcas. Un saludo y muchas gracias.
EliminarGran artículo, Ángel. Una apreciación. Los últimos años veo a los modelos más perdidos que años pasados. Bandazos, diferencias abismales entre unos y otros. ¿No es de suponer que con el paso del tiempo deberían mejorar gracias a algoritmos más "finos" y mayor potencia de cálculo?, ¿que falla en mi razonamiento?.
EliminarSólo una crítica a tu artículo. Yo creo que "Siempre acaba lloviendo"... la pregunta es, cuando?
Muchas gracias por tu comentario. Por lo que respecta a los bandazos en los modelos, no te puedo aportar mucha luz porque yo sigo básicamente el del Centro Europeo (el mejor con mucha diferencia) y, si me apuras, mucho más al probabilístico que el determinista, dado que me refleja de una manera resumida 51 posibilidades de evolución con análisis de partida relativamente distintos. Ello me da una visión globalizadora de por donde pueden ir más o menos los "tiros" de la evolución y sus distintas probabilidades, que es la mejor información disponible. A este respecto sería muy agradecer que AEMET facilitara muchos más productos procedentes de este sistema probabilístico.
EliminarPor otra parte, la mejora de algoritmos y la mayor potencia de cálculo dan lugar a que los modelos cambien de versión frecuentemente. Los responsables suelen anunciar previamente qué modificaciones o variaciones deben esperarse de ese cambio para que los predictores lo tengan en cuenta, pero esa información dificilmente va más allá del ámbito de los Servicios Meteorológicos.
En otro orden de cosas, dado que las situaciones meridianas son en general peor manejadas por los modelos que las zonales y predominando sobre todo las primeras, puede pasar que se produzcan, como observas, mayores cambios e inconsistencias.
Y en cuanto al "Cuando" por supuesto, tienes razón. Podría haber redondeado más la frase :-)
Un saludo.
Veo cierto tipo de mensajes que si llueve o nunca lloverá (irónico), en cuanto tiempo...
ResponderEliminarMirando en el histórico de precipitación, estos periodos de sequía han estado presentes en casi todas las décadas, lo único que a partir de la década de los 90s pues se han ido incrementando en durabilidad, que después han dado años muy lluviosos.
Os invito a documentarse un poco en los libros que Ángel tiene publicados:
- RECUERDOS DEL TIEMPO
-MESES Y TIEMPOS "UNA VISIÓN DE LA METEOROLOGIA EN ESPAÑA"
-COMPARTIENDO EL TIEMPO
En ellos explica su vida como meteorólogo, miles de vivencias personales y de situaciones meteorológicas en 40 años como profesional.
Para mi son una biblia.
Un saludo.
Muchísimas gracias Abelardo. Me encanta que consideres tan útiles mis libros.
EliminarSaludos
Hola Angel. Para que los sistemas tropicales nos afecten creo que la zona de convergencia intertropical (zci) debe situarse por lo menos a 30 grados norte o mas (ahora apenas alcanza los 25 en agosto). Y eso (en caso de suceder) puede tardar décadas o incluso siglos y para entonces el sur de España puede convertirse en un arenal. De todas formas gracias a ti por acercarnos de forma sencilla y divulgativa cuestiones tan complejas aunque las conclusiones a las que se llegue sean dramáticas.
ResponderEliminarHola de nuevo. No me refiero a los sistemas convectivos ligados a la ZCIT sino a las perturbaciones de caracter tropical o subtropical que se forman al norte de ella favorecidas por el aumento de temperaturas del océano y la ausencia de cizalladura con un chorro polar que cada vez baja menos de latitud. Ya hemos tenido ejemplos como la tormenta tropical Delta y algunos huracanes que ya degradados han llegado hasta nuestras zonas. El último ejemplo lo tuvimos el mes pasado con el huracán Ophelia. Igual que acabó dirigiendose a Irlanda podría haber llegado a la Península Ibérica dejándonos abundantes lluvias. Por tanto creo que hay que ir prestando cada vez más atención, mas estudio y más vigilancia a este tipo de perturbaciones, ahora que las ligadas al chorro polar las cuesta trabajo descender hasta nosotros. En este contexto, en el blog puedes encontrar algunas entradaa relacionadas con esta cuestión.
EliminarSaludos y gracias por tu interés
Saludos y felicitaciones por el magnífico blog. Vamos avanzando y no sabemos hacia dónde, ni cuando llegaremos... Pero siempre adelante un poco más. Es bonito comprobar la situación del saber humano en todos los campos. Siempre con la adecuada humildad. Aunque el humus está ahora muy seco...
ResponderEliminarMuchas gracias Luis. Espero que sigamos en ese avance....y que el humus se moje abundantemente. Un saludo.
EliminarEn defensa de Sr. Rivera viendo algunos tipo de mensajes, os enseño una entrevista a su compañero de profesión Julio Marvizón en la que habla de varios temas.
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=3X3T2QNkt1Y
Saludos.
Hola buenas.porque la manipulacion del clima que para muchos es evidente es un tema tabu para los divulgadores e informadores de la meteorologia? Muchas gracias y enhorabuena por tu trabajo
ResponderEliminarGracias huitleño. Para mí no es un tema tabú. Lo que nos pasa a muchos comunicadores es que nos sentimos cansados de múltiples debates con mucha "evidencia" pero sin argumentos científicos profundos (o al menos los que a mí se me han dado hasta ahora). Tras casi 40 años de trabajar día a día con la atmósfera cada vez me parece más dificil lo de manipularla a voluntad. El día que haya evidencias claras de esa manipulación no tendré problema en admitirlo y denunciarlo, pero hoy por hoy, lo siento, pero no las veo. Sin embargo hay otra cuestión mucho más evidente y es hacia donde deberían ir los esfuerzos: la contaminación "convencional" tanto en superficie como en distintos niveles por los motores aeronáuticos. Creo sinceramente que esa es la verdadera cuestión más que las de tipo conspiratorio que quizás se utilizan para desviarnos de ésta otra tan básica y crítica.
EliminarSaludos
Hola Ángel
ResponderEliminarAntes de nada, gracias por el trabajo que sigues realizando.
Una pregunta ¿ hay alguna forma de saber históricos de la corriente en chorro? Saber como funcionaba entonces y si la meandrización que ahora tenemos es algo reciente o cíclico. Las sequías es algo corriente en nuestro entorno mediterráneo, pero lo que apuntas de cada vez más evaporación por períodos más largos de calor es algo a lo que deberemos estar muy atentos.
Gracias
Muchas gracias por tu valoración. Con los reanálisis disponibles de NOAA (desde 1870 creo) y del Centro Europeo, pueden hacerse perfectamente ese tipo de estudios centrados por ejemplo en variaciones de la NAO o de la Oscilación Ártica. Mi sensación -totalmente subjetiva- pero de muchos años de trabajar con la atmósfera día a día es que, desde finales de los 80 o primeros 90, al chorro polar le cuesta mucho bajar de latitud en bloque, lo que dificulta que podamos tener más situaciones del suroeste con lluvias, o que las danas desciendan más de latitud, y "deja más sitio" para estructuras subtropicales. No se si el cambio climático va a dar lugar a sequías más duraderas o frecuentes, -es probable- pero lo que si es muy posible es que las lluvias otoñales sean menos cuantiosas (que no quiere decir que no sean fuertes) y breves, como ya va pasando con las de primavera. Eso, unido a la mayor evaporación, es un problema que hay que abordar en serio cuanto antes.
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