Cuando una gran dorsal de niveles altos y medios de la atmósfera orienta su eje en sentido meridiano deja, tanto al suroeste como al sureste de su núcleo cálido, dos embolsamientos de aire frío, casi estacionarios, que pueden manifestarse en los mapas meteorológicos como danas o borrascas frías. Es una situación que se conoce como "omega" por su parecido a esta letra griega.
Es una configuración que puede permanecer casi estacionaria durante varios días. si bien está sujeta al equilibrio o desequilibrio entre los ramales o segmentos de chorro que la rodean. Cuando el de una rama (ascendente o descendente) predomina sobre el otro, el eje de la dorsal se inclina a derecha o izquierda y la correspondiente dana o borrasca fría se desplaza en dirección contraria. Si se inclina hacia la derecha, la borrasca se mueve en dirección este-oeste y hablamos de retrogresión. El movimiento contrario no tiene nombre definido, y en el caso de la Península Ibérica hablamos de entrada de una borrasca procedente del Atlántico.
Estos días nos encontramos en nuestro espacio geográfico con una situación de este tipo, tal como nos muestra el análisis de 500 hPa del Centro Europeo de esta pasada noche:
Puede verse la inclinación hacia la derecha (este) de la dorsal y la presencia de una pequeña dana sobre el nordeste peninsular, que se ha desplazado en los últimos días desde Centroeuropa por un camino seguido ya por otra anterior. Al norte del mar Báltico aparece una pequeña vaguada mientras que por el oeste se aprecian dos más: una, aproximándose a Azores y otra, mucho más amplia, cerca de las costas canadienses. Puede verse todo ello, aunque en otra proyección, en la siguiente imagen del canal de vapor de agua de Meteosat.
D, es el centro de la dorsal. D1, la dana sobre el nordeste peninsular. D2, la vaguada que va a originar la nueva dana que probablemente llegará a la Península el próximo jueves. Por su parte, V es una débil vaguada atlántica que interaccionará con D1 entre el martes y el miércoles. |
Pues bien, son estas danas y vaguadas y sus interacciones, las que van a condicionar el tiempo de esta semana y probablemente del comienzo de la próxima. Vamos a verlo someramente:
Mañana martes, la pequeña dana sobre la Península se encuentra en posición casi estacionaria. La, en principio débil, vaguada del norte del Báltico ha dado lugar a otra pequeña dana situada ya al norte de Polonia y moviéndose con dirección suroeste. Mientras tanto, en el Atlántico, la primera vaguada ha sobrepasado Azores dirigiéndose al noroeste peninsular, al tiempo que la gran vaguada al este de Canadá ha originado ya una amplia borrasca fría en pleno Atlántico norte.
El miércoles, la dana centroeuropea se ha desarrollado más (estos "remolinos" de las corrientes del nordeste son en general bastante inestables y pueden crecer con rapidez) y se dirige ya claramente hacia la Península Ibérica. Sobre ésta, aparece ya, de forma muy residual, una pequeña dana englobada en una débil vaguada. Está orientada de oeste a este y son los restos de la interacción entre la dana primitiva y otra, muy pequeña, procedente de la vaguada atlántica que se acercaba. Puede ser muy interesante ver en las imágenes de vapor de agua la interacción -o "escaramuza"- en detalle entre ambos pequeños remolinos. En cualquier caso, lo que quede de ellos desaparecerá en un movimiento hacia el este, porque ahora "el mando" le corresponde a la dana centroeuropea que ya está cerca.
A partir de este punto voy a seguir pero utilizando ya los mapas probabilísticos porque, si bien hasta ahora, el EPS no ha puesto pegas sustanciales al modelo operativo, para la evolución siguiente, si hay que tenerlo ya muy en cuenta.
Así, el jueves la dana se encuentra ya sobre el Cantábrico, dando lugar a un probable fuerte temporal en la zona y a un nuevo descenso general de temperaturas, al tiempo que la amplia borrasca atlántica se acerca lentamente a la Península. Obsérvese lo bien reflejada que aparece en el mapa la configuración en "omega". En cualquier caso, no debe pasar desapercibida una cierta incertidumbre sobre las características concretas del ramal de chorro que la circunvala por el oeste y que tiene mucho que decir sobre su posible movimiento posterior.
Antes de seguir adelante, conviene señalar que cuando las borrascas situadas en los flancos suroeste y sureste de la dorsal se acercan tanto, es probable que interaccionen entre ellas, de modo que quede sólo una -o más bien una nueva dana/borrasca fría procedente de su interacción- que se sitúa al sur de la dorsal, originando otra configuración típica denominada "en rombo":
Pues bien, parece probable que en esta ocasión se de esa evolución. En el mapa probabilístico de 500 hPa previsto para el viernes, ambos circulaciones parecen mantener aún su "independencia" aunque ya muy cerca una de otra:
Y ya el sábado, el modelo operativo nos presenta la situación "en rombo" a que antes hacía referencia. Si se produce, volverá a ser muy interesante contemplar en las imágenes de vapor de agua esta nueva "escaramuza" entre remolinos, y ver como uno crece para desaparecer el otro, o como acaban interaccionando entre ambos hasta quedar uno principal.
Sin embargo, el modelo probabilístico presenta algunas dudas sobre el ramal occidental de chorro que rodea a esta nueva -o evolucionada- dana. Y como bien sabemos ello va a condicionar muy mucho su ubicación o actividad.
Por mucho que nos pese, no se puede avanzar más hacia el núcleo de la Semana Santa. Si bien la evolución durante la semana actual parece que será según la hemos descrito (aunque bastaría un pequeño comportamiento distinto de la dana del jueves para que el escenario cambiase... y cosas más difíciles hemos visto en primavera), una vez formada esa dana del sábado, su evolución no se puede predecir hoy por hoy con garantías. Y de su ubicación o de su movimiento la predicción de la primera mitad de la Semana Santa puede variar sustancialmente.
Por pura curiosidad podemos ver cómo el modelo operativo nos da para el martes santo, su paso al Mediterráneo, al tiempo que muestra la posible llegada de otra dana por el oeste:
pero, ante tanto y profuso color morado "semana santa", no se puede a mi juicio arriesgar todavía un pronóstico verosimil. Hay que esperar, como en cualquier primavera que actúe como tal.
Muchas gracias por la explicación Angel
ResponderEliminarMe alegra que te haya sido útil. Saludos.
Eliminarde 10!, muchas gracias Angel
ResponderEliminarde 10! , muchas gracias Angel, esperemos que podamos disfrutar en Malaga de la semana santa.. aunque creo que esta difícil este año
ResponderEliminarGracias Francisco. Vamos a ver; en esta época y tipo de situación, ir más allá de cuatro o a lo sumo cinco días, es casi un brindis al sol. Que haya suerte!
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