14 de diciembre de 2021

¿Un temporal de lluvias tras la Navidad?

Tras la finalización de la situación en la que una intensa y muy húmeda circulación del NW dejó importantísimas cantidades de precipitación en las áreas cantábrica y pirenaica con importantes avenidas de algunos ríos -sobre todo en la cuenca del Ebro donde todavía siguen- se empieza a estructurar ahora una situación de las denominadas “omega” con una marcada dorsal anticiclónica sobre la Península Ibérica y danas o borrascas frías a su derecha e izquierda.

La topografía de 500 hPa prevista para mañana 15 de diciembre muestra una casi perfecta situación "omega" con una fuerte dorsal sobre Francia y España y el chorro circulando por latitudes elevadas. Mientras tanto una dana afecta a Canarias y una borrasca fría a Grecia. 

De una situación de este tipo poco se puede esperar, y menos en invierno: cielos despejados aunque con amplias zonas de niebla, fuertes heladas nocturnas en los valles y disminución drástica de la calidad del aire sobre todo en las grandes ciudades. Es quizás una situación apropiada para permitir una cierta recuperación de las zonas que han resultado más afectadas por las copiosas precipitaciones y las riadas, pero muy poco apreciada para los habitantes de esas grandes ciudades y, sobre todo, para las amplias zonas de la Península donde la falta de lluvias es ya una preocupación apremiante.

Es difícil saber cuándo y cómo va a finalizar una situación de este tipo porque son bastante estacionarias y así lo comentaba en una de las últimas entradas del blog. Sin embargo hoy AEMET ha publicado una actualización de la predicción trisemanal del Centro Europeo de Predicción a Medio Plazo que muestra algunos detalles interesantes -y esperanzadores- respecto a un posible temporal de lluvias de carácter atlántico. 

Veamos la evolución mediante los mapas de anomalías previstas de precipitación (colores verdes indican valores por encima de la media climatológica y morados por debajo de ella. Las zonas en blanco indican que el modelo no encuentra una señal clara para la aparición de una anomalía positiva o negativa, lo que se suele interpretar como que la precipitación no se alejará mucho de los valores climatológicos). Son productos que, más que ofrecer valores cuantitativos, ofrecen tendencias generales de cada semana. 

La semana en la que estamos (13 al 19) la precipitación está por debajo de los valores normales en todas las zonas, si bien la anomalía es menos marcada en el tercio oriental peninsular debido probablemente a las lluvias dispersas que puede provocar la llegada de vientos de levante en capas bajas. Por su parte Canarias se encuentra entre valores normales o ligeramente por debajo.



En la semana del 20 al 26 de diciembre empiezan a observarse algunos cambios. Si bien gran parte de la Península aparece en blanco, se observan valores por debajo de los climatológicos en el tercio norte (lo que, en este caso puede ser una buena noticia), mientras que aparecen valores positivos en el suroeste peninsular, alguna zona mediterránea y desde luego Canarias. Probablemente todo ello sea debido a  un acercamiento de una baja situada al SW de la Península y un cierto reforzamiento de los vientos de componente este.


Es en la tercera semana, del 27 de diciembre al 2 de enero, donde ya se observan cambios más significativos y esperanzadores. Salvo el tercio norte peninsular todas las zonas presentan anomalías positivas. La estructura de ellas sugiere el posible establecimiento de una o varias borrascas en el golfo de Cádiz transitando luego hacia el Mediterráneo,  como si la dorsal atlántica emigrara hacia el N. o se debilitara, permitiendo así el paso o establecimiento de esas borrascas en unas latitudes propicias para nuestras zonas.


Como apuntaba más arriba estos mapas deben ser interpretados como tendencias sin tratar de hacer demasiadas aproximaciones cuantitativas. De hecho, cuando los valores climatológicos de un mes en una zona son nulos o muy bajos, la tendencia de las anomalías no son muy significativas. Sin embargo, en un mes de diciembre que suele ser lluvioso en muchas zonas españolas, creo que estas tendencias nos traen cierta esperanza. Iremos siguiendo la evolución y vayamos viendo si llega ese deseado temporal de lluvias a las vertientes atlántica y mediterránea. 

2 comentarios:

  1. Hola Ángel y buenos días: Revisando tus magníficos artículos del blog, me detuve hoy a ver éste tan excelente (auténtica clase magistral sucienta y clara de las borrascas típicas de estas fechas de prinipios de invierno astronómico).Mi comentario es a "toro pasado" sobre las 3 semanas del modelo CENTRO-EUROPEO de predicción.
    En las 2 primeras han acertado perfectamente, sin embargo la actual en la que nos marcaba un cinturón de mayor pluviosidad desde Azores hasta tercio SurOeste peninsular, creo ver que no ha sucedido, incluso se alargaba tímidamente hasta la ex-Yugoslavia.
    Ayer y hoy hemos tenido el abrazo de la dorsal con influjo del NW en todos los niveles y por lo que apuntaste en tu artículo posterior, no se ven importantes cambios.
    Nada más, te deso buen paso de Años y gracias por tu labor orientativa y explicativa, p ej este enlace que nos has puesto de AEMET que no conocía. Saludos

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  2. Hola Jorge, pues sí, tienes razón. Con frecuencia la tercera semana de predicción "funciona" peor. Además en este caso puede que haya tenido que ver el establecimiento de esta potente dorsal, una de las evoluciones con predecibilidad más baja (la formación, no el mantenimiento). Pues nada Jorge, también mis mejores deseos para el próximo año y siempre. Un saludo.

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