27 de septiembre de 2022

"Hermine", tormentas mediterráneas y un remonte tropical

En el contexto de la serie de fenómenos atmosféricos adversos o violentos que nos vienen afectando desde hace tiempo quiero referirme hoy a los que han sido noticia en estos últimos días: las copiosas y extensas lluvias en Canarias y las tormentas de fortísima intensidad registradas en puntos de las Comunidades Valenciana y Murciana. ¿Hay algún nexo común entre ellas? A la espera de un estudio más profundo, completo y objetivo que las confirme o no, voy a comentar algunas ideas con la ayuda de las imágenes de satélite, preferentemente las del canal de absorción de vapor de agua de Meteosat que nos dan una idea de la circulación atmosférica a niveles medios.

Situémonos hacia el mediodía del jueves 22 de septiembre, unas 24 horas antes de que el Centro Nacional de Huracanes (NHC) diera por nacida a la depresión tropical "Ten" (que poco más tarde sería "Hermine"):


La nubosidad convectiva ligada a la onda del este -que luego sería "Hermine"- está ya alcanzando el océano y también se ve como una amplia inyección de humedad se dirige ya hacia el norte por el Sahara occidental.  Ese movimiento parece estar causado por la acción de la vaguada que aparece como una zona oscura en el centro de la imagen y que engloba al archipiélago canario. Posiblemente esa sea la causa -o al menos una de ellas- de que "Hermine" se dirija hacia el norte en contra del movimiento usual hacia el oeste de este tipo de estructuras ciclónicas tropicales. 

Hago en este punto un inciso para hacer notar que esta no es una vaguada generada por el chorro polar sino por otra circulación más débil y más meridional y que a mi juicio -y también a la espera que una adecuada investigación lo confirme o desmienta- provocó las dorsales estacionarias que dieron lugar a las olas de calor del pasado verano. La relación que pueda haber con las teorías del chorro doble y de las amplificaciones cuasirresonantes es interesante pero ya es otra cuestión bastante más compleja y que se escapa de este análisis. Sigamos por tanto avanzando con esta situación:

Hacia el mediodía del 23 de septiembre, el NHC califica a la onda en cuestión como depresión tropical "Ten"


Se observa ya un remolino ciclónico entre el archipiélago de Cabo Verde y la costa africana con bastantes desarrollos convectivos. Por otra parte la inyección de vapor hacia el norte alcanza ya a Canarias y entra en conexión (al menos aparente) con la rama más meridional de la vaguada a la que hacía referencia anteriormente. La imagen nos recuerda ya a una de las relativamente frecuentes "remontadas tropicales" que desde los trópicos se dirigen hacia Europa. Probablemente esté teniendo lugar de este modo una reestructuración de la circulación hemisférica.

Ese mismo día 23, en su boletín de las 20 horas (UTC), el NHC define ya a la hasta ahora depresión tropical como tormenta tropical "Hermine". La vemos en las siguientes imágenes de Meteosat y de un satélite de órbita polar:





La estructura ciclónica ha subido algo de latitud mientras que la convección crece en su centro como también lo hace en el Sahara occidental. La primitiva inyección de humedad sigue afectando a Canarias...¿forma parte de "Hermine"? ¿es una estructura separada aunque ambas estén inmersas en la misma remontada tropical? 

Veinticuatro horas después, en la tarde del 24 de septiembre, el NHC degrada a "Hermine" otra vez a depresión tropical.  Veamos las imágenes de Meteosat y del polar:





Parece por tanto que la convección no es capaz de mantener una eficaz estructura ciclónica debido posiblemente a la cercanía del continente y a la ingestión de aire seco y polvo. De este modo aparece ya como una circulación de capas bajas casi desgajada de la nubosidad más desarrollada. ¿Es ésta nubosidad "Hermine"? ¿Se trata de un fenómeno PRE (Predecessor Rain Event)? En cualquier caso, la amplia inyección de humedad tropical alcanza ya el norte de África al tiempo que va llegando en mayor cantidad a la zona de Canarias  a través de una conexión con la banda tropical, conexión que muestra a su vez muchos desarrollos convectivos. Las lluvias comienzan ya a intensificarse en Canarias. 

Por otra parte cabe observar en la imagen como una vaguada, ahora sí del chorro polar, comienza aparece sobre la Península. Dos circulaciones, la polar y la tropical/subtropical se acercan, algo que siempre hay que vigilar cuidadosamente. 

Veinticuatro horas después, a las 08 UTC del 25 de septiembre, el NHC declara ya a "Hermine" como borrasca post-tropical, visualizándose todavía algo de giro ciclónico en las capas bajas:



La amplia inyección de humedad tropical continúa y en Canarias se mantienen las copiosas lluvias. El sondeo de Tenerife muestra una atmósfera saturada hasta los ocho km de altura lo que da idea de la gran cantidad de agua precipitable que ha llegado desde el trópico.

Hacia el mediodía de este día, domingo 25, las lluvias se mantienen sobre Canarias aunque "Hermine" ya no existe ni como tormenta ni como depresión tropical y el giro ciclónico ha desaparecido; sin embargo las copiosas lluvias continúan sobre el archipiélago. Ello es debido a la gran cantidad de humedad que permanece sobre las islas, estimulada posiblemente por una pequeña vaguada en la zona.




Mientras tanto otra vaguada del chorro polar se sitúa sobre el oeste de la Península al tiempo que una estructura típica de máximo de viento en altura aparece sobre el centro peninsular. Dado que la humedad subtropical afecta al tercio sur, su combinación con la llegada de ese máximo de viento supone la posibilidad de desarrollos convectivos muy intensos sobre el Sureste. 

Así fue, en la noche de este día 25 y/o madrugada del 26 algunos núcleos tormentosos afectaron a puntos de la Comunidad Murciana con intensidades de precipitación casi desconocidas en nuestras zonas. De este modo, en la imagen del canal infrarrojo de última hora de la noche se aprecia una banda de nubes tormentosas que arranca de la Comunidad Murciana y se extiende hasta Ibiza aproximadamente. 

 
La gran inyección de humedad  junto con los ascensos de la zona de salida del chorro debieron ser sus principales ingredientes. Es verdad que en días anteriores habían aparecido también tormentas intensas pero posiblemente -a falta de poder comprobarlo- las de mayor torrencialidad fueron estas.

Si ahora vemos la imagen de ayer dia 26 por la tarde vemos como en otras ocasiones como la gran banda de humedad tropical/subtropical se ha extendido desde su origen hasta gran parte de Europa.


"Hermine" nació en los comienzos de esa pulsación pero la "remontada" siguió adelante, quizás como un fenómeno de mucha mayor escala. Las copiosas lluvias de Canarias con esa atmósfera tan saturada, ¿era debida a la extraordinaria humedad de esa banda o a la convergencia de humedad provocada por "Hermine"? Probablemente ambas cosas, y quizás alguna más que habría que investigar. Por otra parte, en las altísimas intensidades de las últimas tormentas mediterráneas, ¿tuvo que ver la gran cantidad de energía tanto en forma de calor sensible como latente de la gran inyección de humedad? Es muy posible.

Como vamos viendo la atmósfera subtropical, posiblemente cada vez más cargada de energía, tiene cada vez más influencia en nuestra meteorología, al tiempo que la va perdiendo la polar. Mientras esta última la tenemos mejor estudiada, es necesario que en España se potencie con gran prioridad las investigaciones sobre la primera y sus evoluciones.



















2 de septiembre de 2022

¿Hasta qué punto ha sido singular la generación de "Danielle"?

El nacimiento del -muy pronto- huracán “Danielle” a una latitud tan alta para los ciclones tropicales como los 38ºN está dando lugar a un animado debate en las redes sobre la mayor o menor rareza de este fenómeno. Se comenta que, aún siendo muy atípica la formación en esta zona geográfica, no ha sido el único caso y que al menos un dos por ciento de los huracanes atlánticos conocidos se han generado en esta latitud o incluso algo más alta. Pues bien, estando de acuerdo con esa afirmación, si quiero comentar brevemente una cuestión que me lleva a opinar que “Danielle” sí ha tenido una generación muy singular. 


Como sabemos hay dos formas básicas de generación  de los huracanes atlánticos. Una de ellos, la más clásica, está ligada a la acción de alguna onda del este en latitudes tropicales. Se desarrollan en su seno potentes cumulonimbos que interaccionan y que provocan una caída progresiva de la presión en superficie. Se puede llegar así al cierre de una circulación ciclónica que, si las condiciones son las adecuadas, profundizan cada vez más hasta llegar a convertirse en un ciclón tropical. En este proceso son claves la onda del este, las aguas cálidas tropicales y la escasa o nula cizalladura vertical.

La segunda forma la fuimos conociendo mejor a través del estudio de muchas imágenes de satélite. Tiene como elemento clave la presencia de una débil dana en pleno Atlántico en latitudes subtropicales, o incluso medias.  En su interior, en su centro, unas aguas oceánicas algo cálidas -sin necesidad de llegar a los valores de los 25-26ºC en absoluto- y el aire frío del núcleo de la dana con su escasa o nula cizalladura vertical, permiten la formación de potentes cumulonimbos que pueden llevar a cabo un proceso similar al anteriormente descrito y llegar a formar también un ciclón tropical con una evolución posterior ligado generalmente al de la propia dana.

Pues bien, si esa hubiera sido la génesis de “Danielle” sería un ciclón más de los formados en latitudes medias por un proceso de ese tipo.  Sin embargo, lo llamativo, lo singular de este caso es que se ha desarrollado en latitudes medias mediante un proceso -el anteriormente descrito- que es el típico de las latitudes tropicales. Es decir, se ha reproducido un escenario tropical a 38ºN: eso es para mí lo llamativo de esta situación. ¿Cuáles han sido en este caso las claves? Ante todo la tremenda anomalía térmica en esa zona de las aguas atlánticas y después la práctica ausencia de cizalladura vertical por la no presencia del chorro polar en la zona. Quizás lo diferente ha sido el factor de disparo: Ante la ausencia de ondas del este, lo ha sido probablemente una débil convergencia sobre los restos de un antiguo frente casi desaparecido (proceso por el que se inician muchas ciclogénesis atlánticas con aguas más frías y la colaboración del chorro polar).

"Danielle", un proceso tropical en latitudes medias (imagen tomada de Windy.com)

A la vista de todo ello qué interesante sería ver cuál ha sido el proceso de formación de esos otros huracanes, de ese dos por ciento nacidos en latitudes medias. Sería el dato que nos confirmaría si estamos ante una evolución atmosférica verdaderamente singular como en principio parece.

Al final, gran parte de los fenómenos atmosféricos que estamos viviendo últimamente en España y en muchas otras partes del hemisferio norte -olas de calor, tormentas violentas e incluso este ciclón tropical “fuera de sitio”- tienen en mi opinión un origen común: la tremenda cantidad de energía que, tanto bajo la forma de calor sensible como latente,  se está inyectando desde las latitudes bajas hacia las medias. Si las circulaciones atmosféricas que lo están haciendo posible, son algo pasajero o han venido para quedarse es algo a lo que se debería dedicar un amplio esfuerzo de investigación