Durante muchos años me he venido refiriendo a esta semana previa a la Semana Santa como la "semana de pasión" para los meteorólogos. Son unos días en los que nos solemos ver sometidos a una gran tensión ante la continua demanda de predicciones a varios días vista que permitan planificar adecuadamente viajes, vacaciones o actos religiosos. La cosa se complica aún más dado que, es una época del año, en la que la atmósfera presenta en general poca predecibilidad, de modo que predicciones a más de tres o cuatro días tienen una fiabilidad en general bastante baja.
Sin embargo, este año, las cosas no han sucedido así. Desde hace varios días, los principales modelos de predicción a medio plazo han apostado por la presencia de una amplia dorsal anticiclónica situada durante toda la Semana Santa al oeste o incluso sobre la Península que bloquearía el paso de temporales atlánticos o la llegada de borrascas frías entrando por el noroeste peninsular. Sin embargo, en estas situaciones, suele existir una amenaza importante: que el eje de la dorsal se incline en dirección nordeste-suroeste y permita la entrada de aire frío del nordeste; pues bien, por lo que muestran los modelos no parece que vaya a ser así. Otras dos posibles amenazas -en principio menos críticas- serían la llegada de algún débil embolsamiento frío por el golfo de Cádiz o la "bajada de cabeza" de la dorsal, con la llegada de la parte sur de algunas vaguadas del chorro, al tercio o mitad norte peninsular con una cierta inestabilización en esas zonas. Y de estas dos débiles "amenazas" si que nos indican algo los mapas obtenidos de los modelos probabilísticos.
Para empezar el lunes día 30, la predicción probabilística del Centro Europeo apoya claramente a la configuración mostrada por el modelo operativo del mismo Centro:
El primer día en que aparece una pequeña incertidumbre es el próximo miércoles día 1:
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Ese día, la vaguada en el seno de los vientos del noroeste que discurre por Francia podría afectar algo más de lo que da el modelo operativo al nordeste peninsular. No sería en cualquier caso nada muy significativo.
El jueves 2, no hay nada muy reseñable, mientras que para el viernes día 3, existen algunas pequeñas incertidumbres, aunque sorprendentemente muy pocas para estar en un D+5 de inicio de la primavera:
De nuevo, alguna débil incertidumbre sobre el nordeste peninsular y alguna otra sobre la ubicación de la dorsal anticiclónica sobre la Península. Iría en la línea de que, la débil y casi estacionaria vaguada atlántica situada al oeste peninsular, se acercara algo más de lo que da el modelo operativo. Podría significar un cierto aumento de la inestabilidad en el tercio oriental peninsular con algunos chubascos aislados, sin mayores consecuencias.
Ya, para el día 5, domingo de Resurrección vemos, como no podría ser de otra manera para un D+9 y más en primavera, que el grado de incertidumbre (magentas más intensos) se hacen notar más en el entorno de la Península Ibérica:
Con esta estructura y niveles de probabilidad podría estar más cerca una entrada fría desde el norte o el nordeste o el paso de un débil embolsamiento frío por el sur peninsular. Es algo todavía lejano pero que hay que ir vigilando en los próximos días.
En cualquiee caso, quizás la mejor noticia -o el mejor regalo- los modelos probabilísticos para esta Semana Santa sean este mapa de anomalías térmicas del Centro Europeo para el periodo del 30 de marzo al 5 de abril que ha hecho público AEMET en su predicción mensual:
Puede verse en él como las temperaturas estarán por encima de los valores normales de la época en gran parte de la Península mientras que en el resto se situarán alrededor de ellos. Por lo que respecta a los archipiélagos, la baja resolución de este modelo no nos puede dar información suficiente en relación a posibles anomalías.
En resumen: De modo un poco sorprendente, parece que la atmósfera nos quiere ofrecer en plena primavera un periodo de varios días de tiempo en general seco y tendiendo incluso a algo caluroso. Una Semana Santa como pocas veces se recuerda,... si bien la memoria meteorológica es frágil. Confiemos en que no haya sorpresas. Al menos, los meteorólogos, aunque no las hemos tenido todas consigo estos días, hemos disfrutado ya de una semana de pasión desapasionada como no recordábamos en muchos años.
Llevo siguiendo,Ángel,desde hace por lo menos dos semanas,las salidas probabilistas del NCEP y CFS-V2 en su versión semanal.Desde primeros de marzo,varios aficionados,poníamos nuestras impresiones en el foro cazatormentas,en un hilo que se crea todos los años a este efecto.A mí me he sorprendido la estabilidad de dichas salidas que,desde un principio,apostaban claramente por la estabilidad en la Península durante estos días.Estos modelos eran hasta "cabezones" e insistentes con esto.Supongo que esta es la excepción y no la regla en unos meses como los primaverales( posiblemente,la Semana Santa hubiese caído este año más entrado el mes de abril y otro gallo hubiera cantado).Simplemente era eso,Ángel,subrayar el excelente comportamiento de los modelos probabilísticos americanos y agradecerte esta entrada donde ya pones un poco los puntos sobre las ies acerca de la posible predicción para estos días.Un saludo.
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