Hoy, dos de febrero, es el día de La Candelaria y, a través de múltiples refranes, la tradición popular afirma que si este día llueve puede considerarse que el invierno ha acabado pero que sí no lo hace todavía podría llegar más tiempo de precipitaciones y frío.
Pues bien, la imagen de satélite muestra hoy una nueva dorsal afectando a gran parte de Europa occidental con muchas nieblas y estratos pero sin lluvias. Por tanto, y aunque no estoy del todo seguro que en el contexto del cambio climático estos refranes sigan conservando su relativa validez, esperemos que esta vez sí lo hagan, de modo que todavía las lluvias y nieves puedan visitarnos con generosidad a partir de los últimos días de la próxima semana.
Imagen IR realzada de primeras horas de la mañana del día de La Candelaria. Una amplia dorsal (D) con eje inclinado de Gran Bretaña a Madeira genera bajo ella abundantes nieblas y estratos en Europa occidental. Entre Madeira y Canarias aparece una antigua y muy débil dana (d) que podría atravesar la Península procedente de Canarias hacia el próximo lunes o martes, impulsada por el comienzo de una reestructuración de la circulación sobre el Atlántico, pero que solo produciría aumentos de nubosidad y puede que algún chubasco muy débil y aislado. Por fin, la borrasca (B), situada en pleno Atlántico, irá evolucionando lentamente y es posible que llegue a nuestras inmediaciones hacia el jueves, abriendo el camino a un temporal atlántico.Acumulación de precipitación para los próximos diez días (fundamentalmente entre los días 8 y 10) de acuerdo con el modelo determinista del Centro Europeo). Como se ve, se trata de un temporal claramente atlántico.
La duda es si estas precipitaciones van a seguir o van a ser fugaces. Los modelos de predicción a tres semanas del Centro Europeo vuelven a dar otro rayo de relativa esperanza. De acuerdo con ellos, en la semana del 12 al 18 las precipitaciones estarían algo por encima de los valores climatológicos en el norte peninsular e iguales a los climatológicos (que en febrero tampoco son muy significativos) en el resto de las regiones españolas. La semana siguiente, del 19 al 25, parece que de nuevo las precipitaciones estarían algo por encima de los valores climatológicos en la vertiente atlántica y parte occidental del archipiélago canario y cercanos a los normales en el resto de las zonas.
En cualquier caso, aunque fuera así, no serían suficientes para remediar la situación de sequía que se vive en áreas andaluzas, mediterráneas y muy especialmente en Cataluña. Hace ya más de dos años que no se registra un buen temporal de levante que son los que generan precipitaciones importantes en la mayor parte de la región. Ello es debido a la escasez, casi ausencia, de marcadas ciclogénesis mediterráneas -algo a lo que está también unido la disminución de los vientos de tramontana- que dependen en gran medida de la llegada de danas desgajadas del chorro polar hacia el sureste peninsular.
A este respecto cabe señalar que ello no quiere decir que no haya danas en nuestro entorno geográfico. Pero son danas generadas a partir de chorros subtropicales con muy poca circulación asociada, quedando con frecuencia al sur de grandes dorsales meridianas y con movimientos débiles incapaces de generar en superficie una potente borrasca mediterránea. Este comportamiento de la atmósfera que empezó a manifestarse con más claridad hacia 2015 y que podría estar relacionado con el tipo de circulación de "doble chorro" y el aumento de las olas de calor... ¿ha venido para quedarse o es transitorio? De la respuesta a esta pregunta depende en gran medida nuestra economía y nuestro estilo de vida...¿Se está investigando como corrrespondería? ¿Se está planificando para el caso de que ello ocurriera?